Quién es esa muchacha con la que te paseas día y noche? de la que no te cansas de hablar, a la que miras hasta cuando tus ojos se cierran, con la que sueñas despierto, cuyo nombre balbuceas cuando duermes... Quién es esa chica con la que te pasas el día completo, por la que sollozas en silencio... cuando se va de tu lado y te dice: "adiós amigo", esa por la que darías la vida entera, a cambio de tan sólo una sonrisa, pero sólo te hace sufrir en secreto... Quemándome el alma con cada lágrima tuya, me quedo en absoluto sigilio, como la soledad que te abraza cuando la madrugada entra por la puerta y el día se despide detrás del horizonte naranja de la ventana... Dime ya, por favor quién es esa doncella por la que ríes como un loco hasta llorar como un niño... Deja de llorar por favor, y dime tan sólo su nombre, permíteme ver esa fotografía que presionas contra tu pecho, que parece que cada suspiro que dejas escapar, grava su rostro en tu corazón con trazos de fuego ardiente. Quién es ella que te roba el sueño, que te hace volar por los cielos, aún cuando tus alas están heridas, que te hace sentir el hombre más feliz cuando está contigo, mas el peor desdichado cuando ella se marcha, y la ves perderse en la distancia... Mírame a los ojos, y escucha mis palabras, deja que la oscuridad oculte todo lo que hay a nuestro alrededor, mírame a los ojos y dime: ¿Qué te ha hecho o qué te ha dicho para que estés así? ahogándote en cada lágrima de tu propio llanto, asfixiando tu voz que prefiere no hablarme, por temor a mi reacción... Sabes que no pretendo otra cosa más que hacerte feliz, sanarte las heridas, secarte las lágrimas, dibujar una sonrisa en tus labios... aunque sé que sólo ella puede hacer eso, sería capaz de buscarla por cielo, mar y tierra con tal de saber que vuelves a ser ese príncipe valiente que una vez supo ser mi amigo, ese del que me enamoré ciegamente, ese que me obliga a alimentarme de los celos malditos cuando hablas de ella. No me abraces así, que me da ira saber que no puedo hacer nada para calmar tu dolor, no me regales esa mirada cargada de tristeza mezclada con ternura... que me consumen las ganas de besarte, no me sonrías con esa dulce melancolía que estoy mordiendo las palabras para no gritarte que te amo... Y dime de una buena vez quién es ella... dime su nombre, por lo que más quieras!... No repitas las letras que me identifican, prefiero saber cómo se llama ella! Esa a la que tanto amas... O es a caso... que esa... soy yo?
TE AMO!
No hay comentarios.:
Publicar un comentario